Con la creciente conciencia ambiental, los tazones de papel biodegradables se están convirtiendo en los favoritos del sector de la restauración. A diferencia de los tazones de plástico tradicionales, los de papel están hechos de fibras vegetales naturales y se descomponen rápidamente en entornos naturales tras su uso, lo que reduce significativamente la contaminación blanca. Sus superficies están recubiertas con una capa impermeable de grado alimenticio, lo que garantiza la seguridad de las comidas calientes y cumple con las normativas ambientales. Actualmente, cadenas de restaurantes nacionales e internacionales los están adoptando gradualmente. Gracias a los avances tecnológicos para reducir costes en el futuro, se perfilan como la opción dominante en vajilla desechable.